Los equívocos caminos de la ilusión y la realidad a través de la filosofía, la literatura, el cine, el arte, el periodismo y la ciencia
miércoles, 29 de agosto de 2018
A Mind of its Own
Fine, Cordelia, 2006. A Mind of its Own. How Your Brain Distorts and Deceives. Norton.
El libro no está traducido al español, pero su título podría ser "Una mente muy suya", o "La mente va por libre", pues el objetivo es hacernos conscientes de todas las artimañas de nuestro cerebro para hacer lo que le da la gana, independientemente de nuestra supuesta voluntad o libertad. Se revisan decenas de experimentos psicológicos que llevan a la autora a calificar a nuestro cerebro con nueve adjetivos diferentes: vanidoso, emocional, inmoral, iluso, cabezón, misterioso, indeciso, perezoso, fanático y vulnerable, dando título estos nueve adjetivos a los capítulos del libro.
El libro es una fascinante ventana al funcionamiento del cerebro, esa parte de nuestro cuerpo que utilizamos para intentar comprender la realidad. Es un prodigio de la evolución, pero esa misma evolución lo ha llevado por caminos que es importante conocer si no queremos ser continuamente engañados. No podemos hacer nada contra su naturaleza, pero podemos intentar investigarla, conocerla y comprenderla para intentar contrarrestar el engaño y la ilusión que nos produce.
El primer paso, por lo tanto, es reconocer esta realidad y, humildemente, aceptar que nuestra visión de la realidad puede estar siempre mediatizada por estas distorsiones.
El segundo paso para no ser engañados por este vanidoso "artefacto" es hacernos muy conscientes de sus tretas y aumentar nuestra atención el máximo posible, estando alerta permanentemente para no ser manipulados una vez más: "On a more hopeful note, recognizing and ackowledging our vulnerability to the many common machinations of the brain provides modest scope to guard against them. Some sources of mental contamination, as it has been called, can be sidestepped by simple avoidance... Remaining mindful of our susceptibility to polluting influences can only compensate against them" (pp. 207-209). Aunque no podemos desprendernos de todos los velos que el cerebro nos coloca por delante para distorsionar la realidad, podemos hacer una esfuerzo por aumentar el espacio de conciencia y precisión, enfocar con una luz potente esa realidad a la que intentamos aproximarnos: "While the veil our brain stealthily drapes over reality can never be whipped away entirely, there are other reasons for us not to be completely disheartened. We can be encouraged by the fact that determined efforts on our part to see the world accurately can help counteract distortion. If precision is important enough to us, we are capable of greater consciousness in gathering an considering our evidence" (p.208)
En tercer lugar, podemos entrenar a nuestro subconsciente para que trabaje en nuestro favor, de manera que tras un entrenamiento constante llegue a trabajar en la línea que deseamos y no en la que él disponga o se empeñe: "We can recruit the brain's freelance mind and use it in our advantage, as when we consciously train the mental butler of our unconscious efficiently and effortlessly to fulfill oir aspirations. With some exertion on our part, the unconscious can come to automatically respond to certain situations in a manner that is in line with our conscious wishes" (p.208).
Todo ello exige esfuerzo, dedicación, paciencia: estar atento, aumentar la conciencia, vigilar el subconsciente, estos son los caminos, y sobre todo ser lo suficientemente humildes para no creer jamás que ya controlamos por completo la situación: "Above all, we should try to remain alert always to the distortions and deceptions of our wayward brains. For they are always with us" (p.209).
Y hay un último camino, que no aparece citado de manera explícita en el libro, pero que Cordelia Fine predica constantemente con el ejemplo: el sentido del humor. El sentido del humor está presente a lo largo de todo el libro, y hay ocasiones en las que el lector se rie a carcajadas. Ante una "mente tan suya", tan caprichosa y vanidosa en unas ocasiones, tan pueril y traviesa en otras, no hay más remedio que aceptarla como es y reirse de sus propias contradicciones. El sentido del humor es una de las mejores herramientas que tenemos para bregar con la realidad.
Review
Extracto del libro de Cordelia Fine
Entrevista a Cordelia Fine en el programa REDES
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
estoy preparando un taller de educación emocional y me he encontrado con esto, me ha parecido enriquecedor y útil.
ResponderEliminarGracias